Vivimos una realidad de complejidad exponencial derivada de múltiples factores que ha puesto en evidencia la disfuncionalidad de los actuales modelos de organización, gestión y liderazgo. La clave para responder con efectividad a los retos que plantea nuestra realidad actual es desarrollar Organizaciones Inteligentes que logren, de manera sistemática, los objetivos que derivan de su propósito mediante el desarrollo de entornos de trabajo atractivos y de alto rendimiento que satisfacen las necesidades de la sociedad, empleados y accionistas.
Adéntrate en las 4Ps que hacen realidad una Organización Inteligente (Propósito-Planeta-Personas y Prosperidad) y descubre las palancas cuya activación es necesaria para hacerlas realidad.
Según el World Economic Forum en 2025 habrán desparecido 87 millones de puestos de trabajo y se crearan 95 millones de otros que ahora no existen.
El mundo del trabajo está cambiando y la manera en la que las personas se relacionan para hacer negocios también está cambiando. Esto hace que la mayor parte de organizaciones estén inmersas en procesos de transformación que terminan en un único lugar: personas.
Grandes líderes y dirigentes afirman con rotundidad: nuestras personas son clave para nuestra estrategia. Y yo siempre me pregunto: ¿es que tienes alguna otra alternativa?¿Pensabas ejecutar tu estrategia con monos? Aún nos siguen quedando bastantes años de organizaciones integradas por seres humanos, y el principal problema es que, a la mayoría de esos seres humanos, les encantaría estar en millones de sitios diferentes a su puesto de trabajo (por cierto… Esto también aplica a los CEO).
Exploraremos las grandes tendencias del presente y futuro del trabajo, así como las claves para que nuestras organizaciones puedan transformarlas en ventajas competitivas que les permitan elevar su efectividad.
Tradicionalmente se ha vinculado la palabra “Liderazgo” a grandes personajes que se han constituido en modelos de referencia o a posiciones dentro de una organización con personas a su cargo. El problema de este enfoque es que es obsoleto, limitante y no responde a la realidad.
En la realidad actual todo ser humano es líder porque todos tenemos el derecho y el deber de hacernos cargo (“liderar”) de nuestra vida y nuestras circunstancias. Mi enfoque de Efectividad del Liderazgo basado en las 3Ds: Dirección, Determinación y Disciplina permite que todas las personas desarrollen su capacidad de liderazgo para convertirse en directores y protagonistas de su vida.
Menos del 10% de equipos se autocalifican de alto rendimiento. Y no es por falta ganas o capacidades, todos los equipos que conozco desean tener éxito y están integrados por profesionales sobrados de experiencia y capacidades. Es un problema de “ego individual” versus “ego colectivo”.
En un contexto VUCCA de extrema complejidad y acelerada velocidad como el actual, el talento individual es importante pero el equipo lo es mucho más. ¿La clave? Integrar competencias de “Productividad” que permiten orientarse a resultados y de “Positividad” que permiten construir las relaciones necesarias para que esto suceda de manera continuada.
Emerge con fuerza una tendencia en el mundo empresarial de alejarse del shareholder capitalism para acercarse al stakeholder capitalism. Eventos recientes como la crisis del COVID-19, la declaración de la Business Roundtable (“Statement on the Purpose of a Corporation”, 2019) o las políticas de inversión de grandes firmas como BlackRock ponen de manifiesto la imperiosa necesidad de las compañías de definir, activar y alinear a sus stakeholders con su Propósito si desean convertirse en una Organización Inteligente o de Alto Rendimiento Sostenible.
La conferencia abordará con un enfoque riguroso, práctico y ameno la relevancia del Propósito en el contexto organizativo actual. Asimismo, exploraremos los datos que avalan los beneficios de las organizaciones orientadas al propósito poniendo especial foco en cuales son las claves para que un directivo pueda activarlo en su ámbito de influencia.
El modelo de trabajo de tu organización tiene un impacto directo en tres indicadores críticos: Costes, Productividad y Engagement. En otras palabras, afecta directamente a tu cuenta de resultados, a tu capacidad de conseguir rápido tus objetivos y a tu capacidad de atraer y retener el talento que necesitas para hacer realidad tu estrategia.
Desde mi punto de vista, esto hace que merezca la pena dedicarle tiempo y recursos para asegurarte de que aprovechas todas las ventajas, al mismo tiempo que minimizas los riesgos. Porque sí, también tiene riesgos, y muchos. Y ese lado oscuro del teletrabajo es lo que hizo que compañías como IBM o Yahoo dieran un paso atrás hace años; y que otras como Amazon, Google y Apple lo estén haciendo ahora. Por mucho que empresas con claros intereses comerciales en la implantación masiva del teletrabajo o que el colectivo de freelancers que trabajan en red defiendan este modelo, cuando lo implantas en organizaciones con empleados en nómina, con alta diversidad (perfiles, generaciones, roles, etc.), con posiciones en las que el teletrabajo no aplica, ni es tan sencillo, ni las ventajas son tan evidentes.
Y siendo cierto que vivimos en un mundo hibrido, donde los presencial y virtual se fusionan cada organización requiere su propio traje a medida. Exploremos los factores para tener en cuenta de cara a diseñar e implantar un modelo de trabajo que maximice la productividad y el engagement.
Susana Gómez Foronda